Hansi Flick dijo en la sala de prensa.
Es una victoria triste.
Nadie está contento en el vestuario.
Y era cierto.
Nunca olvidaremos lo que le ocurrió a Marc Bernal al final del partido contra el Rayo Vallecano.
La devastadora noticia que llegó al vestuario confirmó lo que ya se había visto sobre el terreno de juego.
El centrocampista no pudo terminar el partido tras un choque con Isi y Flick se vio obligado a abandonar el campo sin poder hacer una sustitución.
El joven centrocampista era incapaz de poner los pies en el suelo y necesitó ayuda del médico para entrar en el vestuario.
Todo el mundo se temía ya lo peor.
Bernal, en su tercera titularidad de la temporada, se rompía el ligamento cruzado de la rodilla izquierda y se acababan los sueños de Vallecas.
El vestuario era un auténtico funeral.
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