Entró en la segunda parte, ganó un penalti que Soto Grado no pitó, remató al larguero y marcó.
Después de sus primeros 4 minutos ante el Rayo Vallecano, no es de extrañar que el Barcelona esté haciendo todo lo posible por contar con Dani Olmo en la Liga.
El de Terrassa es muy buen futbolista, y lo demostró en apenas medio tiempo, cambiando por completo el rumbo del partido y aportando claridad al juego blanquiazul.
Sólo Lamine Yamal parecía peligroso, pero Lewandowski no aparecía por ninguna parte y Ferran Torres acabó el partido sin apenas protagonismo.
El Barcelona necesitaba vitalidad y la encontró en Lewandowski, el jugador estrella de la temporada.
Cuando recibió el balón en el área, hizo un giro característico y le señalaron penalti.
Soto Grado no quiso ser consultado tras permitir que Lewandowski marcara un gol y desatara el delirio azulgrana.
Como si nada hubiera pasado, Olmo siguió aportando claridad al juego blanquiazul, marcando en cada momento lo que el equipo necesitaba.
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