Hugo Duro (Getafe, 1999) fue la estrella del Valencia-Real Madrid, marcó diez goles, estableció un récord en Primera y fue uno de los puntales del equipo de Baraja.
El delantero, orgulloso de haber debutado con el Madrid en la Liga de Campeones, reflexiona sobre lo ocurrido en Mestalla el año pasado y todo lo que pasó después de aquel partido.
Ha tenido sus mejores momentos.
Todavía quedan partidos y creo que hay que seguir.
Ha sido un año difícil, pero he demostrado a todo el mundo que puedo estar aquí.
Por supuesto, no tengo que conformarme con lo que he hecho y tengo que seguir marcando tantos goles como sea posible.
Hay muchos jugadores que lo están haciendo bien a escala nacional.
Pero el mero hecho de que me asocien con ella y me pregunten por ella es un gran orgullo.
Me encantaría tener la oportunidad de jugar algún día, pero sé que hay mucha competencia.
Hay grandes futbolistas en España.
De momento voy a seguir luchando aquí y eso me llevará allí algún día.
He oído hablar de eso, pero no creo que signifique nada especial.
Me sorprendió ver en la lista a jugadores como Isco y Bellingham, cuyo estilo de juego es completamente diferente al mío.
Esa noche no pude dormir bien porque estaba muy nervioso.
¿Cómo le fue el año pasado? Recuerdo que la Copa Tallonja empezó con un gol y estuvo muy animada.
Los dos primeros partidos fueron bien y justo cuando el club fichó a Edinson [Cavani], se lesionó.
Empezó a jugar y a hacerlo bien.
Su tobillo tardó más de lo esperado en curarse.
Después del Mundial, cuando el tobillo estaba mejor, jugó bien, pero no marcó ningún gol.
Pero bueno, tampoco creo que la dinámica del equipo fuera buena.
Después de todo, tenía 2 años.
Son situaciones nuevas y si me hubiera pasado hoy, estoy seguro de que habría tenido mejores momentos, mejor competición y mejores actuaciones.
Por todos nosotros, me alegro de que ese mal año no acabara peor y de que todos aprendiéramos de él.
Ha sido un año para recordar y espero que en el futuro, cuando vuelvas a encontrarte en una situación similar, lo utilices para ayudarte a tener mejores tiempos y rendir mejor.
No he demostrado nada en el último año y no he demostrado que soy quien se supone que debo ser aquí.
Soy muy testarudo y este es un club en el que cualquier jugador querría estar aquí.
Y bueno, el verano fue un reset.
El equipo, los contadores de goles, los minutos jugados, todo empezó de cero.
Mi psicóloga me ayudó.
Es deportista y me recomendó, y me dijo que sería bueno para mí.
No podíamos permitírnoslo, no podíamos permitirnos los bucles cada fin de semana, el equipo luchaba por ganar.
No podía volver a ganar, no podía volver a contribuir al equipo.
Así que estaba en ese bucle, y no había Sarah, y cuando terminó el año me alegré de que hubiera terminado, y lloré.
Suena mal, pero no quería jugar más.
Luego llegó julio, y desde ese primer día me puse las pilas con una ilusión tremenda, para demostrarle al entrenador que yo debía estar aquí, para ayudar al equipo, para demostrarle a la afición que aquí había otro valencianista, para dejar claro que lo iba a dar todo por el club.
Este año todo ha cambiado mucho y hay 1 partidos por delante con vistas a Europa.
Hay equipos como el Athletic de Bilbao, que son muy buenos, y hay equipos como la Real Sociedad y el Betis, que evidentemente están lejos y luchan por algo más.
Creo que nos hemos ganado el derecho a competir con ellos.
¿En qué se diferenciará el partido del sábado del de la temporada pasada? El Madrid ya no se jugaba la Liga.
Así que entre un equipo que no luchaba por la Liga y otro que luchaba por su vida, teníamos que demostrar al menos que queríamos ganar.
Y así fue.
El Madrid apenas disparó a puerta, salvo en los últimos 1 minutos.
Ahora el escenario es diferente.
El Madrid todavía tiene que luchar por el título.
Afrontamos este partido con ambición, con la ilusión de querer ganar.
¿Qué reflexiones ha sacado de todo lo ocurrido durante y después de aquel partido? Leí comentarios de que Mestalla es racista.