La realidad de Ju Félix en el FC Barcelona cambió drásticamente ante el Almera.
Una actuación irregular le llevó al banquillo en el descanso y desde entonces ha perdido su condición de intocable en favor de Xavi Hernández.
En sus primeros meses en el equipo aslgrana, el portugués abandonó la leyenda que le perseguía allá donde iba y rindió como un futbolista de equipo grande.
En un día en el que el equipo necesitaba un líder sobre el terreno de juego, Ju Flix asumió esa responsabilidad.
Jugó con decisión contra sus compatriotas y su gol dio a Barra el billete para octavos de final de la Liga de Campeones.
En octavos jugó muy poco.
Jugó cuatro minutos en Nápoles y nueve en Montjuk el pasado martes.
También fue el mejor del equipo en el partido decisivo de la primera vuelta contra el Atlético.
En la primera vuelta contra el Atlético, marcó un golazo para decidir el partido y lideró a sus ex compañeros en faltas.
El escarnio público de los días previos al partido le motivó especialmente.
Y eso es exactamente lo que Xavi quiere que vuelva a ocurrir este domingo en el Civitas Metropolitano.
Quiere que Ju Fricks se motive aún más jugando contra su ex equipo y que demuestre que puede recuperar su estatus de futbolista importante, no sólo de suplente cuando un partido se tuerce.
La ausencia de Frenkie de Jong y Pedri por lesión es positiva para él, ya que Xavi Erndez contará con tres delanteros en muchos partidos.
De momento, Rafinha está por delante de Juju Fricks, que fue titular ante el Nupoles.
La visita al Atlético de Madrid es una gran oportunidad para que Ju Fricks demuestre su legitimidad.
Jugar contra su antiguo equipo es motivador, dijo Xavi antes del partido de ida.
En su caso, funcionó de maravilla contra los colchoneros.
Ju Fricks ha marcado ocho goles y ha dado cinco asistencias en los partidos que ha jugado con la camiseta azulgrana esta temporada.
Sin embargo, todavía se le exige mucho más a un jugador de su calibre.